En medio de un “contexto macroeconómico difícil”, tal cual lo afirmó el gerente general de Ledesma Javier Goñi, la empresa apuesta a superar la inestabilidad que impactó negativamente en los números empresariales de los últimos meses. De hecho, a fines de febrero se había destacado una pérdida de más de mil millones de pesos en el tercer trimestre del ejercicio anterior.

Durante el discurso inaugural de la zafra azucarera de este año, el CEO se refirió a dos “temas puntuales que tienen gran efecto” en las líneas de trabajo de la agroindustrial.

“Las altas tasas de interés sin duda hacen muy complejo manejar un negocio tan cíclico como este, que tiene un ciclo agrónomo que lo sufrimos todos. Las empresas grandes y medianas, proveedores somos muy conscientes de ello”.

Sobre bioetanol, aseveró “la incertidumbre” sobre el precio, ya que “la Secretaría de Energía no ha determinado el precio de acuerdo a la fórmula” y que, a su entender, es de gran importancia no sólo para Ledesma, sino para Jujuy y el NOA. Al respecto, destacó el “esfuerzo al gobernador” Gerardo Morales en las gestiones sobre este punto “que daría “sustentabilidad a la familia sucroalcoholera”.

No obstante, destacó el “esfuerzo del Ministerio de Producción con el adelantamiento de la suba del mínimo no imponible para compensar de alguna forma los efectos negativos de la eliminación del decreto 814”.

Este año, Ledesma prevé una molienda de aproximadamente 3.200.000 toneladas de caña de azúcar propia (lo que implica un crecimiento del 6% respecto a la zafra 2018) y 700.000 toneladas de cañeros independientes. La producción esperada es de 293.000 toneladas de azúcar refinado total, y 110.000 m3 de alcohol, cuya mayor parte se destina a bioetanol.

El año pasado inició el Plan Génesis XX!, con objetivos a mediano y largo plazo, donde Goñi repasó la inversión de 11 millones de dólares para esta zafra, entre otras 100 iniciativas estratégicas de innovación, 20 ya finalizadas y otras en desarrollo/estudio.

Otras claves de esta etapa

• El clima que acompañó el crecimiento de la caña permite abrigar expectativas optimistas debido a las lluvias tempranas que cayeron en la primavera pasada, porque eso estimuló un crecimiento más vigoroso de los cultivos, y por ende un mejor rendimiento.

• A esto se suma un buen manejo agronómico del equipo de campo (con abundante riego artificial en verano y una rotación con soja en algunas fincas para equilibrar nutrientes, flora microbiana y aumentar en un 5% el rendimiento de la caña). El resultado final dependerá del clima durante la cosecha y de la ausencia de heladas extensas.

• El inicio de zafra supone 6 meses con plena actividad: 100 camiones transportando caña desde el campo a los trapiches, otros 40 operando dentro del ingenio y 100 camiones por día distribuyendo los productos terminados a los clientes: azúcar, papel, alcohol y productos químicos, a los que se suman también los de frutas y jugos. Implica el empleo indirecto de unas 200 empresas transportistas, en su gran mayoría de Jujuy y Salta.

• Una nueva familia de productos avanza: Ledesma Rubio Mascabo, con mayor presencia de fibras, minerales y vitaminas propios de la caña, siendo más oscura, “rica y natural”; Ledesma Light, con un 50% menos de calorías que el azúcar común (combina azúcar blanca y sucralosa); y. Ledesma 0%, endulzante sin calorías a base de sucralosa. Suma el cuaderno Ledesma +Bio, que se caracterizan por ser completamente sustentable e innovador. Así lo informó el gerente de Comunicación Institucional de la firma, Ignacio Duelo.