“El norte argentino tiene que crecer al doble del promedio argentino para alcanzar en 10 años los niveles que tiene el resto del país”, afirmó el presidente de la Unión Industrial de Jujuy, Federico Gatti, en medio de los proyectos que esperan definiciones en el Congreso, las cargas impositivas, la empleabilidad y los costos operativos que ponen en jaque al sector.
“Todas las empresas de Jujuy vienen trabajando pese a condiciones macroeconómicas o condiciones históricas desfavorables que tenemos en el norte argentino, versus el resto del país”, enfatizó el referente privado, iniciando su análisis de la coyuntura local y nacional.
En vísperas al 2 de septiembre -Día de la Industria- Gatti comentó a Jujuy Económico que, si bien “es un año que hay que celebrar”, se atraviesa por una situación compleja y desafiante. “Hay cambios políticos y económicos que entendemos van en la dirección correcta: baja de la inflación, la no emisión para no generar déficit fiscal, y que el Estado no gaste más de lo que recauda; pero también con un gran peso y una recesión que estamos transitando”, dijo.
A su entender, “algunos sectores están con una leve recuperación” y “la mayoría de la economía todavía no lo ha visto, pero son cambios”. Más allá de este “norte positivo”, el presidente de la Unión Industrial de Jujuy insistió que en esta “transición complicada” hay un gran esfuerzo de las empresas y en especial de las pymes.

“Gracias a Dios y al esfuerzo del privado, no hay desvinculaciones de personal, que sí se dio en otras provincias”.
Gatti marcó los reclamos elevados en primera instancia al gobierno provincial “que obviamente está consustanciado” con la realidad empresaria, siendo el mismo que se plantean desde las uniones empresarias regionales a las autoridades nacionales: “programas que incentiven la microeconomía, reconozcan las asimetrías que tiene el norte argentino y las necesidades que tienen los sectores de buscar algún tipo de salida para la carga fiscal que sufrimos, y no vaya en detrimento de la actividad productiva”.
Esperando que “de a poco” se recupere el consumo, acotó que “ya son 3 meses donde el salario privado está por encima de la inflación”, a diferencia de otros actores en territorio. “La economía, sobre todo en Jujuy, tiene una gran parte del salario que es público, y una gran parte del salario que no es salario, sino que es del sector informal, que obviamente está por debajo del ajuste por inflación”, afirmó.
Por consiguiente, sostuvo que “hay que ver que esa reactivación del sector privado, que es chiquito, permita de a poco ir reactivando el consumo para que empiece la rueda a funcionar en sentido positivo”.
La agenda en el Congreso
En proximidad al tradicional encuentro de las uniones industriales en Buenos Aires en el marco del 2 de septiembre, Gatti se refirió al proyecto de ley impulsado por el ámbito privado que busca equiparar las asimetrías entre las regiones argentinas, apuntando a que “se reflexione” al respecto y vaya más allá de una promoción industrial.
“Hay más de 20 gráficos de indicadores que muestran la realidad distinta del NOA, del NEA, versus la Pampa Húmeda y el resto del país”, mencionó el presidente de la Unión Industrial de Jujuy, agregando que el informe del sector de base contable expone que el atraso en todos los indicadores de esta región “es palpable y bien visible”.
“El norte argentino tiene que crecer al doble del promedio argentino, para alcanzar en 10 años los niveles que tiene el resto del país. Eso habla a las claras del atraso que tenemos porque las condiciones son complicadas: no tenemos ferrocarril o funciona poco, tenemos rutas muy deterioradas, el transporte terrestre es muy caro y sale más caro transportar una mercadería del norte hacia el puerto de Buenos Aires que exportarla después en barco a Europa”.
A los “costos ocultos y los costos visibles” del sector privado, sumó las cargas impositivas y “las tasas que están proliferando ahora en todos los municipios, que también afectan directamente a la producción”.
Gatti afirmó que se aguarda la escucha activa del Gobierno Nacional y del Congreso, también respecto a otros proyectos de ley que aguardan su tratamiento, tales como el incentivo a las inversiones para las pymes argentinas, luego de la aprobación del RIGI (Régimen de Incentivo para las Grandes Inversiones).
“El RIGI es muy importante, lo apoyamos y lo celebramos. Pero también hay que hacer lo mismo para las pymes o para inversiones por menos de 200 millones de dólares”.

Junto a los reclamos sectoriales vinculados al Régimen de Inversiones para el Desarrollo Agroindustrial (Rida), las industrias apuntan a la modificación de la Ley de Biocombustibles N°27.640, normativa que bajó la presencia obligatoria de biodiesel y bioetanol en los surtidores del país.
Sobre el tema, Gatti repasó que sus alcances se abordaron días atrás en comisiones parlamentarias, incluyendo diálogos con los tres senadores nacionales por Jujuy (Carolina Moisés, Ezequiel Atauche y Vilma Bedia). “Es un proyecto que está consensuado por todo el sector productivo, maicero y cañero, por las provincias y también con las refinerías, que siempre fueron un poco las que estaban de la vereda de enfrente”, detalló el representante empresario.
“Estamos consustanciados en que Argentina tiene que crecer en bioetanol. Primero tiene que crecer el sector maicero y el sector cañero, además del biodiesel, y cuando esto ya esté en una tasa de corte arriba del 18%, ingresen las refinerías. Eso tiene que salir y le va a dar una previsibilidad distinta a todas las inversiones que se están esperando”, finalizó.