La caída y diversos vaivenes en el consumo privado, la contracción de empleo privado, la situación de la industria y el agro fueron algunos de los aspectos analizados frente a la caída del PBI del 1,7% interanual en el segundo trimestre de 2024.
Tomando los parámetros informados en septiembre por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), se acumula una pérdida del 3,4% en el primer semestre del 2024, con foco en el estado de la economía argentina y las posibilidades de recuperación en el corto o mediano plazo.
Según datos de Chequeado, el consumo privado (uno de los principales componentes del PBI) cayó en el primer semestre un 8,2% interanual. No obstante, en los últimos meses algunos indicadores de consumo empezaron a mostrar luces verdes. Por caso, las ventas de supermercados tuvieron una variación intermensual positiva en mayo y se mantuvieron casi sin cambios en junio y julio, mientras que la recaudación por IVA (un impuesto que grava la venta de productos de todo tipo) anotó 3 meses de incremento.
En tanto, el índice de ventas minoristas de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) mostró una recuperación intermensual en el segundo trimestre, aunque volvió a dar resultados negativos en julio y agosto.
El índice de patentamiento de autos del INDEC, por su parte, refleja caídas en los últimos registros (mayo y junio), mientras que los datos de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA) marca algunos vaivenes, alternando meses positivos y otros negativos.
Respecto al frente financiero, precisó que las reservas brutas se recuperaron con respecto a noviembre de 2023, al tiempo que se redujo el resultado negativo de las reservas netas a alrededor de US$ 3 mil millones (según estimaciones privadas), luego de alcanzar un resultado positivo temporario en mayo y junio.
Por otro lado, se redujo la brecha cambiaria entre el dólar oficial y los alternativos a un 30% en agosto y un 25% en los últimos días. También se registra una caída del riesgo país a niveles cercanos a los 1.300 puntos básicos.
Por otro lado, hubo un fuerte incremento en los préstamos en pesos al sector privado (registra subas consecutivas desde mayo) y de los depósitos en dólares, que aumentaron un 27% interanual en agosto, impulsados por el blanqueo de capitales.
Mayor pobreza y menos empleo registrado
Siguiendo lo detallado por el INDEC, la pobreza alcanzó al 52,9% de la población en el primer semestre de 2024, el dato más alto en 20 años.
Martín González-Rozada, econometrista de la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT) -que había calculado una pobreza del 51,9% para el primer semestre de 2024- aseveró que en el semestre comprendido entre marzo y agosto la cifra bajó al 49,3%.
También el empleo privado registrado muestra una contracción durante todos los meses del año, mientras que los salarios registrados comenzaron a mostrar una recuperación intermensual a partir de abril, aunque mantienen aún una fuerte caída interanual (del -12%, de acuerdo a los últimos datos disponibles que fueron publicados en junio).
Martín Kalos, economista y director de la consultora EPyCA, dijo a Chequeado que los datos de la economía son heterogéneos. “Hay sectores productivos que están relativamente bien, como la minería y el agro, mientras que los sectores vinculados al mercado interno cayeron y recién en julio tocaron piso y ahora enfrentan un piso pegajoso: le va a costar despegarse y volver a recuperar”, sostuvo.
“En este contexto, es difícil que haya una recuperación significativa, durable y sustentable de la economía en su conjunto. Vamos a tener nichos de consumo que mejoren y vamos a tener un par de sectores que traccionen, pero va a costar que eso se generalice a una mejora de la economía”, agregó.
Por su parte, Eugenio Marí, economista Jefe de la Fundación Libertad y Progreso, dijo a ese medio que “la economía tocó su piso en el segundo trimestre del año y, a partir de ahí, empezó a consolidarse la recuperación. En diciembre, prácticamente todos los indicadores adelantados y sectoriales de actividad, salarios, empleo y consumo mostraban variaciones negativas. En cambio, en julio de 2024 la mayoría fueron positivos”.
No obstante, indicó que “hay que tener en cuenta que la economía sigue por debajo de su PBI potencial y que la clave hacia adelante será impulsar la acumulación de capital y la mejora en la productividad. Se vuelve clave avanzar en la eliminación del cepo, y en profundizar la agenda de desregulación y de reformas estructurales”.
En tanto, un informe de la consultora Ecolatina que analiza puntualmente la situación de la industria y la construcción expuso que se prevé un buen desempeño para las ramas industriales asociadas al agro y al sector minero y energético, pero aquellas vinculadas con la demanda interna (que representan más del 90% del sector) caerán, lo que llevará a que la baja en el nivel de actividad se prolongue en el resto del año.
En cuanto a la construcción, la consultora señaló que en el caso de la obra pública “difícilmente se vea una recuperación significativa dado el freno al gasto de capital llevado adelante por el gobierno”. No obstante, indicó con respecto a la obra privada que “la reaparición del crédito hipotecario, el blanqueo y la falta de alternativas de inversión podrían ser factores que jueguen a favor, pero su efecto pleno creemos que recién podría verse el año entrante”.
Finalmente, el economista jefe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL), Juan Luis Bour, indicó a Chequeado que varios factores económicos “mantienen incertidumbre sobre el ritmo de recuperación” y sugirió esperar nuevos datos que “den una base más firme desde septiembre”.
Fuente: Chequeado