Miércoles, 15 Enero 2025

Jujuy, a la vanguardia de la moda sostenible: las diseñadoras de la nueva generación

Con una pasión compartida por la sostenibilidad y la moda, talentosas creadoras presentaron sus colecciones que impresionaron por su belleza, originalidad y compromiso ambiental. El “Green Fashion Jujuy” fue un éxito, con positiva respuesta del público.

La localidad de Monterrico fue el escenario elegido para este primer evento con estas características. En instalaciones de Bodega El Molle, se vivió una experiencia única que incluyó desfiles de moda, exposiciones de arte, gastronomía local, arte musical en vivo, la fuerza emprendedora y empresaria de habilidosas mujeres de la provincia.

 

Romina Cícero, Nora Gerónimo, Ana Mejía, Máxima Quipildor y otras bordadoras de Santa Ana, Eli Pacheco Giménez, Violeta Mealla y Natalia Orozco fueron las principales protagonistas, plasmando la inspiración en las 4 regiones de Jujuy. Fueron respaldadas por el reconocido diseñador de alta costura Gerardo Casas, ganador del programa "Corte y Confección" emitido por Canal 13.

 La diseñadora jujeña Ana Mejía y Gerardo Casas, invitado de lujo al encuentro local

 

Romina Cicero, una de las organizadoras del Green Fashion Jujuy, relató la esencia de este inédito encuentro. "Las diseñadoras jujeñas quisimos mostrar lo que producimos y que no solo diseñamos con un solo textil; todas con ideas diferentes. En mi caso, trabajo con el hilo de tabaco, porque soy de la zona de los valles y porque es mi materia prima".

La arquitecta indicó a Jujuy Económico que decidió abandonar su profesión para dedicarse a tejer con esta materia prima. "Empecé primero a implementar el hilo de tabaco en objetos de decoración y luego tomé la decisión de crear mis diseños en prendas de vestir. Me invitaron a un desfile, y de allí conocí a Nora Gerónimo. Pasó el tiempo y pensamos en este evento, con la idea de contarle a los jujeños lo que hacemos: un evento 100% hecho por jujeños, con comida jujeña, tejedoras, diseñadores, músicos jujeños y periodistas", dijo.

"Queríamos mostrarle al mundo lo que somos capaces de hacer y mucho más. Este es el concepto de sostenibilidad y sustentabilidad: ayudarnos entre nosotros. Esa es nuestra idea".

En este contexto, mencionó que la propuesta contó con el apoyo de Silvia Giacoppo, llegando así a la bodega El Molle. "El lugar es alucinante. Fue un éxito total en un lugar hermoso. Hoy la gente lo está disfrutando, y lo importante es darle un poco de conciencia sobre lo que es la moda, que tiene un dejo banal y siempre pensé ¿cómo puedo aportar algo bueno? Desde la conciencia que somos todos jujeños. Fusionamos arte, música jujeña, diseño y cultura, y queremos transmitir que, como jujeños, somos cultura: hábitos, valores, conciencia. Y yo lo plasmo en mis prendas, fusionando todo esto. Esa era nuestra idea", cerró.

 

Magia y color desde los Altos Valles

En diálogo con Jujuy Económico, Máxima Quipildor, relató cómo ella y otras 16 colaboradoras del pintoresco pueblo de Santa Ana (departamento Valle Grande) se prepararon para ser parte del Green Fashion Jujuy, con sus prestigiosos bordados “hechos a mano alzada”.

"Trajimos prendas ya confeccionadas con agregados de bordados, y otras que confeccionamos a nuestro gusto. Bordamos lo que nos inspira la naturaleza: pueden ser pájaros como los picaflores, mariposas, rosas, claveles o pensamientos. La inspiración viene de los campos", explicó.

 

En este marco, recalcó que los colores tienen una fuerte carga de tradición, heredada de sus ancestros. “Nos gustan el rojo, el rosado, el morado fuerte; son colores que significan alegría para nuestra comunidad. El negro sólo lo usamos cuando perdemos a un familiar. Cultural y ancestralmente, los colores vivos representan la alegría", manifestó la artesana.

Con una habilidad heredada de su madre, recordó los bordados realizados desde niña. De ahí que busca transmitir esta labor más allá de su generación: “tratamos de rescatar nuestra cultura, aunque a nuestros jóvenes no siempre les gusta, porque les da vergüenza”.


“Es la primera vez que participamos en este tipo de eventos y nos pareció muy bonito. Fue inspirador para seguir haciendo más cosas, utilizando lo que tenemos en nuestra comunidad, como la lana de oveja. Estamos rescatando la técnica de cintura telar que nuestros abuelos  utilizaban".

 

Antolina, herencia de los antepasados

Desde otras latitudes, la diseñadora de Tilcara Nora Gerónimo también brilló con los diseños de su marca “Antolina”, confeccionada en esa convocante ciudad turística.

  

“No sigo las tendencias; hago algo cultural que refleja mi identidad”.

“Es un homenaje a mi herencia, a mis ancestros; todo lo aprendí de mis abuelas. Soy tercera generación de artesanas y me he criado en esa cuna de arte. Antolina era el nombre de una de mis abuelas, y sentí que merecía ponerle su nombre a mi marca”, dijo la diseñadora quebradeña.

“Hago una fusión de tejidos tradicionales con un diseño moderno y contemporáneo. Trabajo con telas de algodón del Chaco, producidas por cooperativas de mujeres, y también con lana que producen las mujeres de la Puna y la Quebrada”, describió a Jujuy Económico.

 

Buscando mostrar su historia a través de sus colecciones, enfatizó que la vidriera principal es el paseo de los artesanos, cautivando a los turistas: “la moda no está sólo en los shoppings, también podemos exhibirla y mostrarnos donde nos sentimos cómodos. La plaza de Tilcara, por ejemplo, es una cuna de inspiración, el epicentro de la cultura viva; de las copleras, los sikuris, y el lugar adecuado para mis diseños”.

Detalló asimismo que cada diseño “no es una prenda cualquiera”, ya que cuenta con un proceso productivo largo que “las personas lo ven con otros ojos, le dan valor y no compran sólo por comprar”.

 

La zona de los valles destacó a su exponente: Ana Mejía, de la localidad de Las Pampitas, fue una de las más aplaudidas por sus singulares diseños de alta costura.

Vistió las pasarelas en Monterrico con sus vestidos de novia y otras creaciones que se caracterizaron por detalles y bordados en 3D, combinando brillos, pedrería, perlas, calidad y distinción.

 

 

La música en vivo fue disfrutada por cientos de asistentes junto a Micaela Chauque -quien lució un vestido de “Antolina”- junto a Los Genios del Beat.

 

Intervinieron además artistas plásticos del Grupo Alquimia con dinámicas de arte sostenible con vinos. Se sumó la cocina en vivo de la mano de los chefs Yésica Cardón y Gustavo Aparicio, e incluso delicias sin TACC de María José Gloss. Las degustaciones de vino de la bodega El Molle y una fiesta sunset fueron el broche de oro.

 

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Modificado por última vez en Martes, 03 Diciembre 2024 08:24

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