El gobernador Gerardo Morales rubricó con la Empresa Jujeña de Energía S.A - EJESA la ejecución del proyecto de generación de energía del tipo híbrida térmico fotovoltaico, que funcionará en el Paraje Piedra Negra, a diez kilómetros de La Quiaca.
“La firma de hoy es un compromiso para ejecutar un proyecto de producción de energía, con un sistema de acumulación que es un paso a lograr una generación más de 2 megas”, indicó Morales. Agregó que se habla mucho de los sistemas de acumulación para grandes cantidades de energía, pero Jujuy tomó la decisión de ser pioneros en energías renovables.
Participaron de la firma el acta acuerdo y memorándum de entendimiento el titular de EJESA y EJSEDSA, Adolfo Pagliarulo; el Presidente de EJESA, Horacio Cristiani; el gerente de EJESA, Ricardo Aversano; el Secretario de Energía, Mario Pizarro; el titular de la SUSEPU y Presidente del Instituto del Litio, Héctor Simone; el Ministro de Hacienda, Carlos Sadir y los diputados, Carlos Amaya y Victoria Luna Murrillo.
El gobernador subrayó que “es importante trabajar junto con JEMSE y que se puedan viabilizar muchos proyectos más con EJESA, no solo para acompañarlos en la responsabilidad de ser distribuidores sino también para generar energía, recordando que el inspirador de esto es el presidente Mauricio Macri”.
Por su parte, Adolfo Pagliarulo manifestó que el acuerdo rubricado con el gobierno es para convertir la Central de Piedra Negra y transformarla parcialmente con generación solar. Anticipó que se instalarán cuatro hectáreas de paneles solares, se reducirá el uso de combustibles fósiles, derivados del petróleo con lo cual se tendrá menores emanaciones de gases nocivos para la atmósfera.
Por último, adelantó que el inicio de obra en Piedra Negra, está previsto a partir del segundo semestre con una inversión aproximada de 3 a 4 millones de dólares y que podrán ser abastecidos 2.000 hogares de la Puna.
Pizarro, a su turno, destacó que el proyecto a ejecutar será oportunamente enriquecido en rueda de consultas a la que serán convocados todos los actores del entramado social de la región, garantizando de esta manera espacios de participación efectiva y diálogo constructivo.